BULBO PILOSO

Atendiendo a las características de nuestro cabello, damos con que este es mucho más que pelo. Como puedes imaginar, su proceso de crecimiento es muy complejo e incluye el trabajo de cientos y cientos de células y de cuantiosas partes de nuestro cuerpo. Una de ellas es el bulbo piloso, la cual queremos dar a conocer y diferenciar de otros conceptos.

¿Qué es el bulbo piloso?

El bulbo piloso es una zona del folículo piloso que hace las veces de soporte o retén para los vasos capilares, el canal folicular y las células que, posteriormente, se convertirán en cabello. En él se llevan a cabo todos los procesos necesarios para que las células se trasformen en pelo: mitosis, pigmentación, alimentación…

Este es visible sin microscopio si arrancamos un cabello sano de nuestro cuero cabelludo. Resulta ser ese recubrimiento blanquecino que tenemos recubriendo la raíz. Esto es, se trata de la maceta donde va a plantarse cada uno de nuestros vellos.

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Características bulbo piloso

Del bulbo piloso, la información más importante a destacar es que:

  • Es una estructura de color blanco, lechoso a la vista humana, pues nos permite ver el cabello contenido en su interior.
  • Cuenta con hasta tres capas de células basales, las cuales aportarán los ingredientes celulares que viajan por la vaina externa que se formará.
  • Debajo de estas damos con las que se conocen como células germinativas, que son las que se van a desarrollar hasta convertirse unas en vaina pilosa y otras en pelo. Estas están dispuestas ya de manera ordenada, en seis anillos concéntricos, siendo los tres exteriores los que conformarán dicha crústula y los tres interiores los que se transformarán en cabello, quedando este, como es lógico, dentro de la vaina.
  • Este cambia de forma en función del momento en que se encuentre el cabello, siendo redondeado durante su crecimiento y volviéndose cilíndrico durante la fase catágena, es decir, en el momento de transición, tras detenerse el crecimiento capilar y cuando el cabello comienza a desprenderse de la papila.

Bulbo piloso y caída del cabello

Aunque no siempre es así, es cierto que las agresiones que sufre el bulbo piloso como son la exposición a los rayos UV o el estrés oxidativo, terminan por hacer que el folículo piloso se vea modificado. Ello supone que se den circunstancias muy variadas como la miniaturiación, el engrosamiento de la vaina conjuntiva, cambios en la microcirculación capilar, adelgazamiento de los cabellos, mayor fragilidad, pérdida de implantación del folículo, masa capilar deficiente…

Consecuencia de ello tenemos, como puedes imaginar, la pérdida de pelo de manera precoz. Aunque los pelos tienen un ciclo de vida que se repite unas 20 o 25 veces, estos se pueden ver acelerados por condiciones como estas, de manera que tu pelo puede morir antes de lo que correspondería.

También resulta curioso conocer que, si se sufre de alopecia androgenética, nuestros folículos irán reduciéndose de tamaño. Si llega el punto en que el bulbo desaparece, habremos perdido la posibilidad de volver a ver crecer el pelo que le corresponde albergar.

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